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¿Ver porno es peligroso para la salud?

He aquí una visión general de los efectos y peligros potenciales de la pornografía en nuestra salud física y mental.
Hombre frente a pantalla de computadora
Descubre los efectos de la pornografía en tu salud.Cortesía

Ver porno se ha convertido en una práctica habitual en nuestra sociedad, fomentada en gran medida por la facilidad de acceso a los contenidos en Internet. Un estudio del Pew Research Center reveló un aumento de más del 30% en el número de visitas a sitios pornográficos en la última década, lo que pone de relieve una tendencia creciente. Esto plantea algunas preguntas importantes: ¿qué impacto tiene el consumo de pornografía en nuestra salud física y mental? He aquí lo que dicen estudios y expertos sobre este controvertido tema.

La cuestión de la adicción a la pornografía sigue siendo objeto de debate en la comunidad científica. Mientras que algunas investigaciones sugieren que la pornografía puede inducir una dependencia conductual similar a otras formas de adicción, otras cuestionan esta noción. Algunos especialistas prefieren el término “consumo problemático de pornografía” para describir este fenómeno, a fin de reflejar mejor los matices y controversias que rodean la cuestión.

El estudio L'étude Pornography Addiction? A Neuroscience Perspective publicado en 2016, afirma que la pornografía activa los mismos circuitos cerebrales vinculados a la recompensa y el placer que los implicados en otros tipos de adicción. También destaca los paralelismos entre la adicción a la pornografía y otros comportamientos adictivos, como las aopuestas o la adicción a la comida. No obstante, los investigadores subrayan la necesidad de seguir investigando en este campo para comprender mejor esta presunta adicción.

Lo cierto es que determinar si la pornografía representa un riesgo para la salud no es sencillo. Es por eso que hemos destacado algunos factores a tomar en cuenta antes de emitir una respuesta en concreto.

Una herramienta para explorar la sexualidad

Es una ventana para explorar la sexualidad, sin embargo, hay ciertos aspectos a tener en cuenta.

Getty Images.

Para algunos individuos y parejas, la pornografía puede servir como herramienta para explorar diferentes aspectos de la sexualidad y las fantasías. Un estudio titulado Pornography and Sexual Experiences Among High School Students in Sweden examinó el impacto del consumo de pornografía en las experiencias sexuales de los adolescentes y descubrió que la pornografía puede utilizarse para explorar la diversidad de prácticas y preferencias sexuales.

La desensibilización

Según un informe del Instituto Max Planck de Berlín, la zona del cerebro que se activa cada vez que vemos porno tiende a reducirse con el tiempo, lo que va unido a un descenso de la satisfacción. Como resultado, tendemos a ver contenidos cada vez más duros para compensar y alcanzar el mismo nivel de estimulación sexual. ¿Estamos eternamente insatisfechos? Los investigadores siguen dándonos el beneficio de la duda: “No está muy claro si es ver porno lo que provoca cambios en el cerebro o si las personas que nacen con un determinado tipo de cerebro ven más porno”.

Los efectos en el desempeño sexual

El consumo de contenido para adultos podría provocar disfunción eréctil, según sugiere un estudio de 2016 que examinó la relación entre el consumo de pornografía en internet y la disfunción sexual, incluida la disfunción eréctil en hombres.

Los autores analizaron varios casos clínicos y observaron una correlación entre el consumo excesivo de porno y el desarrollo de disfunción eréctil en determinados individuos. También en este caso, el estudio no establece una relación causal definitiva y, sobre todo, destaca la importancia de tener en cuenta los hábitos de consumo de porno a la hora de evaluar la disfunción eréctil en los hombres, sin descuidar otros posibles factores.

Otro estudio en el que se analizaron los hábitos de 280 hombres descubrió que los que veían regularmente películas clasificadas X cada semana se excitaban más sexualmente. Conclusión, el consumo de porno puede mejorar la respuesta a los estímulos sexuales. El mismo estudio también descubrió que la frecuencia con la que se veía pornografía estaba relacionada con un aumento del deseo sexual, ya fuera solo o en pareja.

En la vida matrimonial

Ver porno puede tener efectos tanto positivos como negativos en la vida matrimonial. Entre los efectos negativos, el consumo de pornografía puede contribuir a crear expectativas poco realistas e influir en las relaciones sexuales de pareja. Según las investigaciones, esta influencia puede llegar a alterar la satisfacción sexual con un compañero o compañera real, o animar a los adolescentes a intentar reproducir comportamientos o escenarios vistos en películas para adultos.

Pero la pornografía también puede tener aspectos beneficiosos, especialmente cuando se consume de forma consciente y constructiva dentro de una relación de pareja. Ver porno juntos puede ofrecer a la pareja la oportunidad de explorar y diversificar su vida sexual, fomentando la comunicación abierta y la comprensión mutua. Además, la pornografía puede estimular la imaginación y proporcionar una dosis de fantasía, ayudando a reavivar la llama de la pasión. Por último, para algunas parejas, puede incluso reforzar la intimidad y fomentar un sentimiento de unión al compartir una experiencia íntima y personal.

El impacto en la calidad del descanso

Estudios han demostrado que el porno tiene un impacto notorio en el descanso.

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El consumo excesivo de pornografía puede tener un impacto negativo en el sueño. Un estudio publicado en 2017 examinó las asociaciones entre el consumo problemático de pornografía en internet y varias dimensiones de la salud mental, incluidos los problemas de sueño entre estudiantes universitarios. Los resultados mostraron que los individuos con consumo problemático de pornografía eran más propensos a experimentar trastornos del sueño, como dificultad para conciliar el sueño, despertares frecuentes durante la noche y, en general, mala calidad del sueño. Estos resultados sugieren que el consumo excesivo de pornografía en línea puede contribuir a alterar los patrones de sueño y comprometer el descanso nocturno, lo que puede tener repercusiones negativas en la salud física y mental a largo plazo.

La relación con la ansiedad y la depresión

La relación entre el consumo de pornografía y la ansiedad, así como la depresión, es compleja y llena de matices. Un metaanálisis de 2018 examinó las asociaciones entre el consumo de pornografía en línea y diversos trastornos psicológicos, como la ansiedad y la depresión. Los resultados mostraron vínculos significativos entre el consumo de pornografía y un mayor malestar psicológico en algunos individuos.

Sin embargo, sigue siendo difícil determinar si el consumo de pornografía conduce directamente a la ansiedad y la depresión o si los trastornos preexistentes conducen a un uso excesivo de la pornografía como herramienta de afrontamiento o escape.

Artículo publicado originalmente en GQ Francia.